El Brigadier es un ratón gamer diseñado para quienes ya no quieren conceder ventajas y están listos para dejar atrás el mayor de los lastres: el miedo al triunfo. Con sus siete botones, su excelente sensor, sus amplísimas posibilidades de personalización, el Brigadier es un paso firme hacia adelante. Uno que se hace respetar.

El Brigadier está muy sólidamente equipado. Sus interruptores de alta calidad soportan más de 5 millones de clics, y su cable mallado resiste la torsión al tiempo que evita los enredos. Además, su sensor óptico Pixart PAW3212 lee los movimientos —lentos o rápidos, atinados o incomprensibles— con total precisión, incluso en niveles de aceleración muy altos.

Como buen T-Dagger que es, El Brigadier posee un potente sistema de retroiluminación RGB con efectos coloridos y dinámicos, niveles de brillo ajustables y amplias opciones de personalización. Para sintetizarlo con una frase ligeramente provocadora: te dará todo el brillo que a tu talento le falta. 

¿Lo prefieres en su versión blanca o negra?

3 botones permiten jugar. 6, competir. Así que ¡deme 7!

Los 2 botones extra de la parte superior están dedicados al cambio de DPI. Los 2 del lateral, por su parte, sacan al pulgar de su letargo y le dan la posibilidad de ser útil. Por fin. Y todos, además, pueden personalizarse a través del contralor dedicado, lo que incluye la grabación de macros.